La CGT no podemos permanecer en silencio mientras los salarios pierden poder adquisitivo, la vivienda se encarece sin límite, los alimentos de primera necesidad para mantener una dieta equilibrada intocables, los servicios básicos como la luz y el gas están por las nubes llevando cada vez más personas a la pobreza y la indigencia. Mientras tanto, los bancos, las energéticas y las grandes empresas obtienen cuantiosos beneficios.

Este llamamiento a tomar las calles, a la movilización, a mostrar la disconformidad con la situación actual está más que justificada. No entendemos aquellos que escondiéndose detrás del diálogo social permanente consagran que los ricos sean cada vez más ricos y los pobres más pobres, pactando convenios de miseria y taladrándonos con la idea de que hay una crisis, cuando lo que hay es una concentración de riqueza en pocas manos

La CGT estamos luchando en cada empresa, en cada sector, allí donde tenemos presencia para revertir esta situación y acabar con la impunidad del liberalismo económico basado en la depredación y el egoísmo. En contraposición a la solidaridad y el apoyo mutuo, banderas que el movimiento obrero no debemos abandonar, ya que son nuestra fuerza.

Tener un trabajo no garantiza tener medios económicos para vivir, de hecho la mayoría de la clase trabajadora subsiste con salarios de miseria, para intentar cubrir las necesidades y poco más. Mientras unos pocos con salarios bien altos o grandes beneficios nos adoctrinan con la crisis, la

guerra, el barco de canal de Suez, que si China, que si la India…. O cualquier excusa para convencernos de que hay motivos para mantenernos en la miseria. Basta de cuentos y de excusas para ocultar la realidad.

Se ha instaurado el Terrorismo desde el Estado contra la población. Terrorismo sanitario, porque no tener acceso a la sanidad y los medicamentos de inmediato puede condenarte a graves consecuencias, cuando no, a la muerte; terrorismo alimentario, si no podemos comprar alimentos de primera necesidad para mantener una dieta equilibrada; acabar en la calle por no poder pagar el alquiler o la hipoteca y no solucionarlo desde la legislación es terrorismo, porque la vivienda no es un lujo; no poder encender la calefacción en invierno por no tener recursos económicos es terrorismo energético y se ceba en la gente con menos recursos y así podríamos seguir enumerando indefinidamente injusticias.

Y para defender a los poderosos y al Estado, se mantiene la Ley Mordaza, se reforma el código penal para castigar duramente con años de cárcel las protestas, cada vez que legislan es para eliminar la poca libertad arrancada tras años de luchas. Los derechos fundamentales de los que tanto nos hablan, no existen, son un holograma con todo se especula y todo se ha de convertir en beneficios, pasando por encima de las personas.

Por eso la CGT seguiremos saliendo a la calle, porque ya está bien de retrocesos en nuestros salarios, en las condiciones de vida y en la perdida de la calidad de vida.

Los actos previos de difusión se desarrollarán bajo el hashtag #11MLaCGTenBCN.

Federación Local de Sindicatos de Barcelona. Organización anarcosindicalista: de clase, autónoma, autogestionaria, federalista, internacionalista y libertaria.

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