Corría el año 1888 cuando en las calles de Nueva York comenzaron a suceder fenómenos extraños. Testigos directos relataban a los periódicos de la época la presencia de seres fantasmagóricos que recorrían las calles amparados en la oscuridad de la noche.
Resumen de privacidad
Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.