La Generalitat de Catalunya, liderada por Convergència i Unió (CiU) y respaldada por Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), comunicó el pasado 13 de febrero a la empresa adjudicataria del servicio telefónico 012, Atento Teleservicios, un recorte del 30% del presupuesto anual. Este nuevo recorte, uno más de una larga lista que parece inacabable, supondrá el despido de 19 trabajadores y 63 modificaciones de las actuales condiciones de trabajo de la plantilla, un conjunto de medidas que también va a repercutir en la cualidad del servicio de atención al cliente.
Llamar al 012 cada día sale más caro para la sociedad. Los recortes aplicados en el presupuesto del servicio 012 de atención al ciudadano de la Generalitat de Catalunya que se han venido aplicando hasta ahora, y los efectuados recientemente, han comportado una disminución en la cualidad de la atención al cliente. Algunas de las medidas llevadas a cabo por la empresa Atento, y consensuadas con la Generalitat, han sido la desaparición de la atención personalizada durante los días festivos, los fines de semana y todas las noches. “Se están primando los servicios por internet y los contestadores automáticos, pero no todos los ciudadanos y ciudadanas tienen internet, y mucha gente mayor no sabe y no puede hacer las gestiones por estos canales” asegura la presidenta del comité de empresa, Laura Gómez, quien tiene una larga experiencia como teleoperadora.
Los recortes también afectan de manera importante al conjunto de la plantilla de trabajadores y trabajadoras. Entre las medidas establecidas destaca el despido de 19 teleoperadores y la eliminación de las jornadas continuas para transformarlas en jornadas partidas que ocupan todo el día. Esta medida no solo afectará a la conciliación de la vida laboral con la familiar, sino que muchos teleoperadores que tienen dos trabajos para poder llegar a fin de mes van a tener que dejar alguno de ellos. Todo y que los recortes no afectan a la cuantía salarial, ya pactada por convenio, entre las nuevas medidas presupuestarias también se contempla la reducción de la jornada laboral de muchos trabajadores que pasaran de las 39h actuales a tan solo 30.
El pasado jueves 18 de abril un grupo de trabajadores de Atento se manifestaron ante la sede de la Generalitat para protestar contra los nuevos recortes, pero actualmente el conflicto esta enquistado porque ni la empresa ni la Generalitat muestra intención alguna de mover ficha para desencallar la situación. “La Generalitat rebaja el presupuesto, exige la misma cualidad y se niega a hablar con el comité de empresa, y la dirección de la empresa es desconocida y pasa de nosotros, solo conocemos a los mandos intermedios” denuncia Laura Gómez.
Entre la plantilla de Atento están representados 6 sindicatos, CCOO, UGT, STC, CSIF, USOC i CGT, pero solo el último está luchando por la mejora de las condiciones laborales. El miedo entre la plantilla es generalizado y esto genera desmovilización. “La gente se agarra como puede a su puesto y renuncia a las condiciones conquistadas en el pasado pensando que no le tocará el despido, pero tarde o temprano te toca”, ha sentenciado Laura Gómez.
Las medidas tomadas por la empresa significaran la destrucción de empleo y la precarización de los trabajadores que se queden, y en consecuencia, una nueva factura para la clase trabajadora, a quien le toca pagar la crisis producida por el buen funcionamiento del sistema capitalista.
