Apunta que el dinero viene del cobro de comisiones y publica el número de cuenta. El alcalde de Barcelona lo niega y se querella contra el medio por “un delito de injurias y calumnias graves”
El periódico El Mundo publicó ayer en portada que la policía nacional está investigando Xavier Trias por tener dinero no regularizado en paraísos fiscales, concretamente una cuenta por valor de 12,9 millones de euros en Andorra. Según este medio, el 13 de febrero del 2013 el alcalde de Barcelona habría transferido presuntamente los fondos desde Suiza a una cuenta andorrana justo después de que estallara el caso Pujol. El artículo sostiene que el dinero procedería del cobro de comisiones y acaba recordando que el mejor amigo de Trias es el empresario Javier de la Rosa, encarcelado por el caso KIO a principios de los 90.
El alcalde no ha tardado en reaccionar de manera contundente, tanto de palabra como de obra. “Eso es ciencia ficción, es falso”, ha afirmado. Este martes por la mañana Trias ha presentado una querella contra El Mundo, que ha contraatacado con la publicación del número de cuenta.
En una larga carta dirigida a El Mundo, Trias ha lamentado que se publiquen informaciones “que no tienen ninguna relación con el ejercicio del libre derecho a transmitir informaciones verídicas, sino justamente al contrario, que faltan a la verdad y suponen una grave afectación de mi buen nombre y de mi reputación personal”.
El alcalde entiende que estos hechos son constitutivos de “un delito de injurias o calumnias graves con publicidad” y, por lo tanto, ha interpuesto una querella contra los firmantes de la publicación, y contra la editora de El Mundo como responsable social solidario, “sin perjuicio de dirigir la acción penal y civil contra los que pudieran resultar imputados”. Por otro lado, Trias confía y reclama que, “como acto de justicia, se publique en la portada del periódico una rectificación que restituya mi honorabilidad”.
El falso borrador contra Mas
A falta de pruebas sólidas y de un veredicto judicial, se trata de otra andanada catalanofóbica de la caverna periodística española y su deriva enfermiza y hostil contra el proceso independentista y la consulta del 9-N. El caso recuerda al falso informe policial publicado por El Mundo en noviembre del 2012 según el cual Artur Mas y otros dirigentes convergentes tenían cuentas en Suiza. La noticia estalló “casualmente” en plena campaña de las últimas elecciones autonómicas catalanas con el objetivo de impedir la que parecía una mayoría absoluta de CiU y que al final no fue.
Este episodio de manipulación informativa sobre un borrador anónimo elevado a la categoría de prueba irrefutable, terminó en una querella de Mas y en una rectificación del propio medio. Eso sí, en una columna breve sin ninguna disculpa explícita, en un artículo ambiguo y autoabsolutorio que decía que la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) rechazaba validar el informe porque ninguno de sus miembros lo había elaborado, cosa que esta unidad reiteró ante el juez del caso Palau.
La información también aseguraba que el Sindicato Unificado de Policía (SUP) liderada por el españolista Sánchez Fornet, -basta una simple lectura de sus tuits para entender la magnitud democrática e intelectual del personaje-, sí atribuía a la UDEF un borrador que habría pasado meses oculto en un cajón y que posteriormente se difundió entre los medios y se entregó al juez.