En ningún caso podrá Aglaya ser una mujer más bella que Natasia Filíppovna, pues la belleza es el zumo que supura de una herida por la que ella jamás habrá sufrido. Siempre un sucio Lebédev andará rondando la pura presencia del príncipe Mishkin, por más que nunca lograrán artimañas y […]