Olvidar Sicilia

Segesta, en Sicília, expuesta al sol sin subterfugios, recibiendo bendiciones y desgracias, ambas cosas por igual; siempre crudas, puras, exacerbadas. En la distancia, la dulce tibieza del mar; dentro, sobre esa cúspide de tierra erguida –una mano alza al hombre, sólo un poco, en dirección al dios–, el templo de […]