En una nota de urgencia, ayer informábamos de la nueva redada en casas particulares y varios ateneos libertarios de la ciudad de Barcelona, dentro de la segunda fase de la llamada Operación Pandora. En diciembre de 2014, la Audiencia Nacional española, con el juez Javier Gómez Bermúdez a la cabeza, movilizó a 700 Mossos d’Esquadra en busca de una supuesta organización terrorista de ideología anarquista a los que se les acusaba de varios atentados a entidades bancarias. Al final se detuvieron a once personas, las cuales todas ellas fueron puestas en libertad sin cargos el pasado mes de enero. En aquellos momentos, con el gobierno municipal del alcalde Xavier Trias (CiU), había una gran movilización vecinal contra la clausura de varios centros populares ocupados, algunos desde hacía 25 años, como ere el caso de la llamada “Kasa de la Muntanya”, en el barrio de Gràcia. Por ello, no fueron pocos los que vieron en aquella operación policial un intento de criminalizar la protesta con la represión y la entrada masiva de la policía en casas ocupadas o centros sociales vecinales independientes, que no estaban en la órbita del gobierno conservador del consistorio.
El operativo del miércoles, se nos dice que es una segunda fase de aquella operación, ya que el objetivo, según fuentes policiales, es buscar pruebas y personas relacionadas con los llamados Grupos Anarquistas Coordinados (GAC) que, tal como están las cosas por estos lares, uno ya no sabe si existen de verdad o es una muestra más de la guerra sucia que tanto se lleva en estos días. Porque además de responsabilizar a la GAC de la puesta de unos explosivos en la catedral madrileña de la Almudena, en la basílica del Pilar de Zaragoza, y contra entidades bancarias italianas en España, a los detenidos del año pasado se les acusó, y por ello sólo pasaron un mes en la cárcel, por enfrentarse a la policía antidisturbios. Ayer, 29 de octubre, hubo nueve detenidos que a estas horas ya estarán camino de Madrid para declarar ante la Audiencia Nacional. La operación fue mandada por el Juzgado Central de instrucción número 3 de la citada Audiencia Nacional, cuyo titular, el juez Juan Pablo González, ha decretado el “secreto de sumario”.
En la cuenta oficial de twitter del actual equipo de gobierno municipal de la alcaldesa Ada Colau (Barcelona en Comú), se preguntaban: “¿Terrorismo anarquista en Barcelona? ¿Quién lo ha visto? ¡Basta de criminalización de la disidencia! Y lanzaban el hashtag #JoTambéSocAnarquista (Yo también soy anarquista).
LAS CUP ANULA UNA REUNIÓN CON “JUNTS PEL SÍ”
Las Candidaturas de Unidad Popular (CUP) han anulado una reunión con la candidatura de “Junts pel Sí” (JxSí). La CUP y JxSí tenían programada una reunión el pasado miércoles por la tarde enmarcada en las negociaciones para la formación del gobierno de la Generalitat tras las elecciones autonómicas del pasado 27 de septiembre. Pero la detención de los nueve anarquistas y la participación de la policía autonómica en el operativo, les ha llevado a aplazar dicha reunión. La organización independentista ha declarado: “Entendemos que se trata de una nueva operación con la clara intencionalidad política de reprimir un movimiento contestatario y de oposición a la situación política, económica y social actual”. La CUP también ha señalado como en este caso, el gobierno provisional de la Generalitat ha demostrado una gran obediencia para con la Audiencia Nacional española, poniendo a los Mossos d’Esquadra al servicio de dicho tribunal. En este punto el comunicado de la CUP dice: “Cualquier proceso de ruptura con el Estado español consideramos que ha de incluir la desobediencia a los tribunales españoles represores y herederos del Tribunal de Orden Público (TOP) del franquismo”. Para la organización anticapitalista, la declaración que firmaron con JxSí y que presentaron conjuntamente el pasado martes en la Mesa del Parlament: “Inicia un proceso de construcción de la república catalana, en la cual la represión contra los movimientos populares no ha de tener cabida”. Por su parte, el exdiputado y dirigente de las CUP, David Fernández, estaba en Catalunya Ràdio en el momento en que la policía estaba efectuando los registros, y declaró: “Sí eran terroristas hace un año cuando fueron detenidos… ¿cómo es qué ahora estén en la calle?”. Fernández también cree que esta es una operación más de la “criminalización de la protesta”,y mostró toda su solidaridad con los detenidos. En el programa de las CUP se apuesta por “la transformación de raíz y la democratización de los cuerpos policiales de los Mossos d’Esquadra, en línea de erradicar las prácticas policiales que vulneran los derechos fundamentales de las personas”.
