El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz ha llamado a declarar como imputado al ex consejero delegado de Gowex, Jenaro García, después de que éste confesara que había falseado las cuentas de la compañía. El juez instructor iniciará la investigación de unos hechos que supuestamente pueden constituir delitos societarios tales como el falseamiento de cuentas, de información económica y financiera, y en el uso fraudulento de información relevante.
García tendrá además que entregar su ordenador personal y teléfono, como ya ofreció en un escrito presentado ante la Audiencia Nacional. El juez Pedraz adopta esta decisión trás haber consultado a la Fiscalía Anticorrupción. El Ministerio Público se ha pronunciado a favor de que la competencia de la Audiencia Nacional para investigar el caso de Gowex al afectar a una generalidad de personas, en calidad de inversores, y porque los hechos se extienden también fuera del territorio nacional. En este sentido, en el auto se señala que los hechos investigados han causado un grave repercusión en la seguridad del tráfico mercantil y en la economía nacional. En la resolución de Pedraz se señala también que Jenaro García reconoció en el escrito presentado ante la Audiencia Nacional que las cuentas de Gowex desde de su salida a Bolsa «no responden a la realidad contable de la misma, lo que no impidió la captación de nuevos inversores».
García informó a través de su perfil de Twitter que había realizado una confesión «voluntaria» sobre el falseamiento de las cuentas de Gowex en los juzgados y que asumiría las consecuencias, además de prestarse a colaborar con la justicia. En su confesión, de apenas un folio, incluía nueve puntos en los que ofrecía información financiera y fiscal y reconocía que los resultados de los últimos ejercicios no eran reales. En un comunicado publicado a inicios de esta misma semana en el Mercado Alternativo Bursátil (MAB), la compañía anunciaba que García había dimitido tras reconocer que las cuentas de, al menos, los últimos cuatro años «no reflejan su imagen fiel» y atribuyéndose la «autoría de esta falsedad».
La dimisión de Jenaro García se produjo después de que las acciones de Gowex, suspendidas desde la semana pasada de cotización, se desplomasen un 60% y perdieran casi 870 millones de su capitalización bursátil tras un informe de la consultora Gotham City Research en que se rebajaba el valor de los títulos de la firma española a cero euros, asegurando que el 90% de las ventas del grupo no existían y no era más que un engaño contable. El informe de la consultora señalaba un fraude semejante al de Pescanova y anticipaba la suspensión final de la cotización. Gotham, como han señalado diversos analistas, no había llevado a cabo un riguroso estudio financiero, sino que se había limitado a señalar las numerosas incongruencias y las sospechas derivadas de éstas que sobrevolaban desde hace tiempo sobre la actividad de una empresa dedicada a la instalación de wifi gratuito en entornos urbanos. Gowex llegó a valer antes del informe hasta 1.400 millones de euros.
El estallido de Gowex ha mostrado las carencias de un sistema en que todo los que podía fallar ha fallado. Auditores, colocadores de acciones, gestores del mercado financiero, proveedores y clientes, sin dejar de mencionar, unos organismos reguladores pillados de nuevo en ese sopor en que llevan instalados desde hace décadas. El informe de Gotham evidencia un dato lamentable para todo el sistema financiero del estado español: que nadie hace su trabajo. Y así, sin estudios financieros, sin control, sin análisis, ha reventado una nueva burbuja de lo que no era más que otro fraude anunciado. Una dudosa gestión, que sin embargo, atrajo a numerosos interesados en compartir las ganancias de un negocio que tenía como pagador principal a las administraciones públicas que firmaban los contratos con García. Así, la explosión de la burbuja de Gowex deja atrapados a cientos de inversores que compraron títulos de la tecnológica. Las acciones de la empresa de wifi perdieron el 60% de su valor antes de ser suspendida la cotización. Una señal clara que indica que, de forma probable, perderán el resto de su inversión, ya que Gowex ha solicitado el concurso de acreedores al admitir que no puede hacer frente a sus deudas.
Ahora, y mientras la empresa está descontrolada y bajo investigación judicial y los trabajadores comienzan a movilizarse sin saber bien dónde acudir, se empiezan a conocer numerosos datos sobre las prácticas del hasta hace nada, empresario de éxito, emprendedor y abanderado de la marca España, Jenaro García, que, por ejemplo, controlaba a través de dos sociedades un 47,35% de la firma de redes wifi hasta el pasado 30 de junio, es decir, un día antes de que se presentará el informe que acabó destapando la falsedad de sus cuentas. Se trata de un porcentaje menor que el que García controlaba unos meses antes, lo que prueba que el exdirectivo vendió acciones en el mercado durante el primer semestre de este año. Así, al cierre de junio, solo dos sociedades tenían participaciones en la empresa superiores al 10%: Cash Devices -la sociedad patrimonial de García-, con un 23,24%, y Biotelgy -con sede en Luxemburgo y también vinculada al fundador-, con un 24,11%. Son porcentajes algo por debajo de los datos que aparecían en la memoria de 2013, en los que figuraba una participación del 27,4% para Cash Devices y 24,7% para Biotelgy. El resumen de esta venta es que Jenaro García vendió acciones de su empresa por casi 69 millones antes de que todo el entramado saltase por los aires.
Este artículo ha sido redactado y/o validado por el equipo de redacción de Revista Rambla.