Iniciado el mes de agosto es un buen momento para hacer un balance sobre los robos en viviendas en España. Y los datos vuelven a poner de manifiesto que el verano es el momento preferido por los ladrones para robar en viviendas. A lo largo y ancho de España, el incremento de este tipo de delitos se ha incrementado, por lo que las fuerzas de seguridad alertan de la situación y aconsejan a los propietarios de las viviendas a reforzar las medidas de seguridad y ser lo más prudentes posible.
De hecho, hay zonas donde el riesgo de sufrir un robo en la vivienda se duplica en estos meses con respecto al resto del año. Según los datos del informe “Los robos en viviendas españolas aseguradas”, localidades como Málaga, Granada, Pontevedra y Ciudad Real son algunas de las localidades donde hay un mayor porcentaje de posibilidades de ser una víctima.
Para reducir los riesgos de ser víctima de uno de estos delitos es importante que los propietarios tomen algunas medidas “extra” en esos días de vacaciones. En un momento en el que muchas personas dejan su hogar unos días para disfrutar de su tiempo de ocio, son muchas las bandas organizadas que hacen su particular “agosto” protagonizando robos a lo largo y ancho de toda España. Y la zona del litoral Mediterránea es una de las más afectadas por este tipo de delitos.
De este modo, entre las medidas a tomar destaca la instalación de alarmas, cámaras, cerrojos y puertas blindadas. En la Costa del Sol, por ejemplo, los cerrajero Malaga aumentan su trabajo de una forma exponencial debido al incremento de llamadas que reciben por avisos de cerraduras forzadas o de gente que ha visto cómo sus vecinos y amigos han sido víctimas de un robo y quieren prevenirse reforzando sus cerraduras.
Es una inversión que, a medio y largo plazo, puede ser muy beneficiosa y rentable. Y es que el botín medio de los robos en España es de unos 4.500 euros, según el mismo informe, mientras que las aseguradoras suelen hacer frente a un pago de entre 1.700 euros y 1.900 euros, lo que en la mayoría de las ocasiones no cubre el total de pérdidas.
Para evitar este tipo de situaciones, los cerrajeros cuentan con los dispositivos necesarios para minimizar los riesgos. En concreto, según explica un cerrajero de Málaga con más de una década experiencia en el sector, es común la instalación de escudos anti-mordaza, cilindros antiextractor, cerrojos de seguridad adicionales, sistemas anti-bumping o antiganzúa.
Otra opción también consiste en la instalación de cerraduras anti-rotura de manganeso, o escudos anti-rotura, taladro y extractor. Todas las recomendaciones anteriores ponen de manifiesto que los padres cada vez son más experimentados a la hora de forzar las cerraduras, por lo que hay ponerlo lo más difícil posible para evitar que se lleve a cabo el robo.
En Málaga, por ejemplo, el verano ha sido especialmente complicado para la Policía que ha llevado a cabo diferentes investigaciones y detenciones de ladrones de viviendas, constatando la existencia de bandas en activo de diferentes orígenes y que, además, cada vez son más violentas. En concreto, la Policía Nacional ha desarrollado varias operaciones contra organizaciones croatas y georgianas especializadas desde hace años en los robos masivos de viviendas.
Uno de los consejos más sencillos a tener en cuenta, en caso de no cambiar la cerradura, es el de cerrar siempre con llave la vivienda, tanto al irse de vacaciones como al salir, aunque sea solo por unos minutos. Cuando observemos en testigos de plástico o hilos de pegamento entre la puerta hay que avisar al 091 porque lo más probable es que se trate de marcas que los ladrones ponen para identificar si la casa está ocupada.
Este artículo ha sido redactado y/o validado por el equipo de redacción de Revista Rambla.