La manera de llevar la consulta al Congreso ha monopolizado una semana más el contexto político catalán a causa de la posición de ERC. El lunes Mas afirmó que veía en Ghandi una inspiración para los catalanes por el movimiento pacífico y popular que lideró aunque precisó que no se podían hacer paralelismos entre ambos procesos y que Catalunya debía continuar su propio modelo. Y le llovieron críticas de los mismos sectores políticos y mediáticos que sin rubor habían banalizado el Holocausto comparando el independentismo con el nazismo.
El president del Govern también anunció su compromiso de devolver la paga extra a los trabajadores públicos si el Estado transfiere el impuesto de la banca. Por otro lado, avisó del riesgo de ruptura si no hay consenso sobre la pregunta.
ERC y la pregunta de la consulta
El martes ERC paralizaba la petición al Congreso de la competencia para convocar la consulta hasta que no se pacte una pregunta clara a la consulta y con dos respuestas posibles: sí o no.
Un día después, ERC e ICV-EUiA ponían al descubierto sus discrepancias en el proceso: los republicanos insinuaban que los ecosocialistas se dedican a hacer la pinza con Unió mientras que ICV-EUiA les acusaba de recelos constantes. Mas ponía énfasis en el hecho de que estos enfrentamientos provocan fatiga en el país y que su gobierno intensificará la llamada al consenso para no hacer el ridículo.
En cuanto al jueves, ante la sempiterna amenaza de Rajoy de que un estado catalán quedaría fuera de la Unión Europea, Mas celebraba que el presidente del gobierno español admitiera la posibilidad de una Catalunya independiente. Joana Ortega anticipaba que la partida presupuestaria del Govern para la consulta sería de unos 5 millones de euros ampliables, una cantidad que según ella aseguraría el buen funcionamiento de la consulta.
La semana política bajaba el telón con dos noticias: por un lado, el anuncio de la consellera d’Ensenyament de Irene Rigau de presentar un recurso de inconstitucionalidad a la LOMCE por invasión de competencias y, por el otro, Mas garantizaba que lo que ha sucedido en el País Valencià con el cierre de Canal 9 no pasará nunca en Catalunya. Además reiteró su oferta que TV3 se pueda ver en el País Valencià, teniendo en cuenta que sería el único canal en catalán en esta comunidad.
