Esquerra considera que sin ser un estado independiente no se pueden hacer otro tipo de presupuestos más favorables a cuestiones sociales. Así, al menos, respondió la portavoz de ERC, Anna Simó, a las críticas de PSC e ICV-EUiA por la ausencia de ERC en la manifestación contra los recortes y por su apoyo a las cuentas de la Generalitat para el próximo año. Simó pidió a sus, formalmente, compañeros de oposición, si «creen honestamente que sin la independencia es posible hacer otro tipo de presupuestos».
En rueda de prensa celebrada en la sede de la formación, Simó añadió que Esquerra “escucharía de manera muy atenta” a PSC e Iniciativa si estos presentaban “una alternativa mejor para el incremento de ingresos” y pidió a los dos grandes partidos de izquierda de Catalunya que «reflexionen sobre qué marco político creen que necesita Catalunya para hacer unos presupuestos diferentes a los de 2014», en referencia a las posturas de socialistas y ecosocialistas sobre el derecho a decidir y la soberanía.
Simó calificó las cuentas públicas para el 2014 como “unos presupuestos de resistencia”, y se mantuvo en el guión habitual de Esquerra insisitiendo en que no es posible «denunciar los presupuestos sin denunciar el déficit fiscal, el drenaje fiscal y la deslealtad del Gobierno». Para la dirigente republicana, en este primer año de legislatura «se ha hecho más evidente el margen de maniobra escasísimo de la Generalitat para dar respuesta a las necesidades del país». Simó defendió que estos presupuestos no incluirán ningún recorte adicional, gracias a ERC. «Dentro de este marco político no son posibles ningunos otros presupuestos que atiendan las necesidades de este país y den a la ciudadanía lo que merece», ha insistido Simó que ha reiterado que “un nuevo Estado” serviría para que los catalanes puedan gestionar sus impuestos.
Anna Simó también se refirió a que están «a punto» de fijar la fecha de la consulta, y que la pregunta que propone su partido coincide “bastante” con la de la Assemblea Nacional Catalana (ANC). ERC quiere una pregunta «clara», que aluda directamente a la independencia y que sólo permita respuestas binarias, es decir o “sí” o “no”. Un tipo de respuesta adecuada a la pregunta propuesta por ANC: “¿Quiere que Catalunya sea un Estado independiente?”
Simó valoró el primer año de legislatura del Govern Mas de forma positiva ya que «pese a algún ruido, se va avanzado hacia los compromisos políticos adquiridos el 25 noviembre», al estar, en su opinión, más cercana la posibilidad de establecer la fecha y el enunciado de la pregunta de la consulta. La diputada republicana recordó que su partido mantenía el compromiso sobre el límite que se habían marcado este diciembre para fechar la consulta y que las «claves» para ERC son: que los partidos sean claros para ejercer el derecho a decidir y que la gente mantenga su voluntad de votar. Simó insisitó en la lectura que un 80% de los que votaron -en las pasadas elecciones al Parlament- se mostraron a favor de una consulta y ésta ha sido l”a prioridad de ERC en esta legislatura”, junto con «el giro social dentro del estrechísimo margen de maniobra de las instituciones catalanas» mientras Catalunya no tenga las herramientas de un Estado. Simó también quisó apuntar que las distintas encuestas hechas públicas en el último año indican que el apoyo de la ciudadanía a una consulta ha ido creciendo. «Las personas favorables a que se pueda votar son cada vez más, y demuestra la madurez democrática de los catalanes, que se contrapone a la falta de madurez democrática del Gobierno español», remachó, dejando de lado cualquier entendimiento con el Ejecutivo de Rajoy respondiendo a las palabras del ministro Montoro que ha asegurado que cabe el acuerdo con el Govern n el terreno económico para salir de la crisis. El responsable de la Hacienda central opinó que «si vivimos la integración europea no tiene sentido en un divorcio materialmente imposible de hacer». Ante esta valoración, la diputada al Parlament republicana ha lamentado que el Gobierno central «se empeña en decir que es imposible e inviable que en el marco del Estado español el pueblo de Catalunya pueda votar su futuro político». Además, ha deplorado que el ministro haya vuelto a «agitar el fantasma» de que Catalunya saldrá del euro y habrá más desigualdades si declara la independencia.
Por último y sobre la posibilidad de que el Estado cree un impuesto sobre la banca tras haber recurrido el gravamen catalán en este ámbito, ERC se ha quejado de «la armonización tan a la baja» que plantea el Gobierno central y se han reafirmado en la necesidad de mantener el tipo que propone la Generalitat, de entre el 0,3 y el 0,5%.
