La recepción de Walter Benjamin (1898 -1940) en España hoy en día es amplia y viva. En Cataluña contribuye a ello como vínculo geográfico el desenlace mortal de su intento de huida del terror nacionalsocialista en Portbou. Con todo hay que destacar que es precisamente un artista visual a quien debemos una de las lecturas más comprometidas. Francesc Abad (Terrassa, 1944) se inspiró en el pensamiento de Walter Benjamin a principios de los años 80 (apenas publicada la recopilación de ensayos traducidos al catalán por Antoni Pous), mucho antes de que este se convirtiera en una referencia obligada en todos los ámbitos de la cultura. Pues esta afinidad entre el artista conceptual catalán y el pensador judío alemán tiene que ver intrínsecamente con el concepto de experiencia que W. Benjamin desarrolla a lo largo de su obra y que culmina en el gran proyecto inacabado de los Pasajes. Se trata del concepto de una experiencia histórica capaz de recuperar los sueños y las luchas de las clases oprimidas, enterrados debajo del progreso de la historia de los vencedores. Según Benjamin, esta experiencia liberadora y revolucionaria tan sólo puede producirse en un momento de reconocimiento del pasado desde el presente, en un instante que suspende el continuo linear del tiempo. La compenetración de pasado y presente aparece en forma de lo que él llama una “imagen dialéctica”. Inevitablemente, semejante síntesis de concepto, imaginación y compromiso político tenía que influir en las concepciones y los recursos artísticos de Francesc Abad.
La instalación multimedia block W. B., un pensamiento que crea imágenes inaugurada en 1996 en el Museu de Granollers, mostró la envergadura estética y conceptual de dicha influencia. El exhaustivo archivo, entendido como taller abierto, consistiendo en instalaciones, fotografías, recortes de textos, diarios de trabajo (Diarios del pensar) y de videos fue vertebrado por las –hasta aquel momento conocidas– 18 tesis Sobre el concepto de historia de Walter Benjamin.
Sobre la base de todo este material, el Goethe-Institut Barcelona expuso en 2010 las “Correspondencias Abad-Benjamin”, un mural de 18 metros aproximadamente. En una larga tela azul se fijaron con agujas y cinta adhesiva fotocopias y fotografías de los múltiples proyectos del artista, dispuestas de una manera asociativa que pretendía interpretar mediante constelaciones su relación con ideas del pensador. Los grupos temáticos giraban alrededor de conceptos clave como memoria y olvido, el tiempo, la fragilidad del pasado, huellas, pasajes, la historia de las víctimas, dolor, civilización y barbarie, crítica del progreso y transgresión utópica.
Finalmente, un fotomontaje del mural se convirtió en una página web. La cinta interactiva permite abrir cada elemento en una ventana donde aparece la imagen junto a una explicación y/o la transcripción de los apuntes (en catalán, castellano y alemán).
El conjunto ilustra como Francesc Abad relaciona ideas, como modifica motivos a lo largo de los años y, sobre todo, en qué medida su comprensión del arte, de la tarea del artista y su compromiso con la historia de los oprimidos nace del diálogo constante con el pensamiento de Walter Benjamin.
Una página web permite seguir de cerca el diálogo del artista con uno de los pensadores más inquietantes del siglo XX: http://www.mural-abad.net/index.html
