El cambio radical del modelo de Urgencias extrahospitalarias en la Comunidad de Madrid ha traído un absoluto desbarajuste en la sanidad de la comunidad regentada por Isabel Díaz Ayuso.

Médicos sobrepasados y pacientes desconcertados son el pan de cada día en los centros sanitarios. Todo ha desembocado en diferentes huelgas y protestas para recuperar la dignidad asistencial pública en Madrid, tanto para los profesionales como para los usuarios.

Cambio de modelo

El punto de ignición de la situación se sitúa el pasado 24 de octubre, cuando el Ejecutivo madrileño puso en funcionamiento un nuevo plan de atención con la apertura de 80 centros sanitarios que debían funcionar 24 horas al día. Para ello se dictó la reapertura de los 37 SUAP (Servicio de Urgencias de Atención Primaria), clausurados desde la pandemia Covid, para agregarse a los 41 SAR (Servicio de Atención Rural) que seguían en funcionamiento.

Del total de los 80 centros, 46 de ellos deberían contar con un médico presencial fijo, el resto, 34, solamente con dos enfermeras, un celador y los famosos equipos de videoconferencia para atender a los pacientes de forma online. Este «desproposito», tildado así por los sindicatos, supuso que el primer día de funcionamiento, casi el 60% de los facultativos solicitaran una IT (baja laboral).

Huelgas

El sindicato mayoritario de los médicos en Madrid, Amyts, convocó el pasado lunes una huelga indefinida que no tiene visos de finalizar. La organización denuncia el «caso organizativo y la sobrecarga asistencial» que supone para los facultativos el nuevo modelo de Ayuso. En este sentido, se quejan de que no ha habido nuevas contrataciones para asumir la carga de trabajo. Por eso, dicen que no desconvocarán la huelga hasta que se cubran 200 plazas estructurales que aseguren el correcto funcionamiento del nuevo modelo.

A esta huelga está previsto que se sumen a partir del 21 de noviembre los médicos de familia y los pediatras de la Atención Primaria de Madrid, que protestan por tener unas «agendas infinitas» y no disponer de tiempo suficiente para atender debidamente a los pacientes.

Dimisiones

Todo ello ha supuesto un goteo incesante de dimisiones en la cúpula directiva de la tención Primaria de Madrid. Este lunes, por ejemplo, fue apartado del cargo el gerente adjunto de Gestión y Servicios de la Gerencia Asistencial de Atención Primaria, Pedro José Suárez Sánchez, tras la dimisión en días anteriores de la gerente asistencial, Sonia Martínez Machuca, de la gerente asistencial adjunta, Almudena Fernández Cano, y de la Dirección Asistencial Sureste, que gestiona 39 centros de salud y 21 consultorios locales de los municipios circundantes a la A-3 (Madrid-Valencia) y de importantes barrios madrileños como Vallecas.

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