Amnistía Internacional acaba de publicar su último informe sobre los derechos humanos en el mundo, en el que advierte que detrás de la crisis económica se esconde una bomba de relojería que provocará todavía más vulneraciones de los derechos de las personas. Como siempre, la ONG no se queda con los brazos cruzados y dedicará el 2009 a lucha contra la pobreza sin abandonar la denuncia política. Bajo el nombre de “Exige Dignidad”, comienza una nueva campaña mundial, en otras cosas contra los crímenes de guerra. Su presidente en Catalunya, Pep Parés, habla para la Revista R@mbla de estas y otras cuestiones.
¿Cómo afecta la crisis al tercer mundo. Sólo se habla de Europa y EEUU, pero qué pasa con los países pobres?
No se puede solucionar la crisis sin arreglar los problemas del mundo en desarrollo. La situación es tan extrema que en muchos países, como Egipto o Camerún, se han hecho manifestaciones contra el hambre, que en ocasiones fueron reprimidas con dureza. Más de mil millones de personas se encuentran en el umbral de la pobreza y sufren hambre y desnutrición. El propio Banco Mundial asegura que 150 millones se vieron afectados el año pasado por la crisis alimentaria, a lo que se suman los 53 millones que lo harán durante este año. Esta situación radicalizará todavía más los conflictos ya existentes.
Amnistía lanza la campaña “Exige Dignidad” para luchar contra la pobreza. ¿Cuáles son sus objetivos?
Con “Exige Dignidad”, queremos denunciar los vínculos entre la pobreza y las violaciones de derechos humanos. En una primera fase, nos centraremos en los asentamientos precarios -que afectan a uno de cada tres habitantes de la Tierra-, en la mortalidad materna y en las actividades de empresas extractivas que vulneran los derechos humanos. Sin embargo, para que las personas que viven en la pobreza disfruten de sus derechos, es preciso asegurar su acceso a los derechos sin discriminación, su participación en las decisiones que les afectan, y la rendición de cuentas de los que cometen abusos. Los líderes del mundo deben actuar y comprometerse. Es por ello que reclamamos que EEUU firme el Pacto Internacional por los Derechos Económicos, Sociales y Culturales; y que China rubrique el Pacto Internacional por los Derechos Civiles y Políticos. De hecho, es la única gran potencia que todavía no lo ha hecho. De haberlo firmado, no hubiera sido una violación fragante de sus compromisos interacinonales vetar la condena a la junta militar de Birmania ni haber impedido condenas más duras contra el régimen de Sudán.
Occidente da la espalda a esta cruda realidad…
Sí y además lleva a cabo actuaciones paradójicas, que no solucionan la raíz de los problemas. Por ejemplo, persigue a los piratas de Somalia pero no impide el tráfico ilegal de armas a este país, que vive en conflicto desde hace años. Los combates en la capital del país, Mogadiscio, y sus alrededores habían causado 16.000 muertos desde enero de 2007.
Esta situación aumentará la presión migratoria sobre una Europa convertida en una fortaleza cada vez más inexpugnable. En vuestro informe decís que los Estados recurren a métodos cada vez más severos para mantener a los inmigrantes fuera de sus fronteras.
Sólo en 2008, 67.000 personas intentaron atravesar el Mediterráneo para llegar a Europa y no se sabe cuántas murieron durante el trayecto. Y una vez aquí se encuentran con restricciones muy duras. En algunos países pueden ser encerradas hasta un periodo de 18 meses en centros de internamiento. Son personas sin papeles pero tienen los mismos derechos humanos que cualquier ciudadano.
Sin embargo, en España las medidas no son tan duras….
Aquí, pueden ser internados por un máximo de 60 días si cambian la ley, pero los centros están en muy males condiciones.
¿Con la crisis, aumenta el racismo?
Sin duda los ataques xenófobos están aumentando. Uno de los casos más graves se han producido en Italia y Serbia, donde se han expulsado a las personas de etnia romaní de los barrios donde vivían y las han trasladado a un descampado. En muchas ocasiones, a los inmigrantes se trata como delincuentes, cuando el primer delincuente es el empresario que les ofrece trabajo de forma ilegal.
¿Europa cada vez es menos solidaria?
Los refugiados por motivos políticos cada vez lo tiene más difícil para entrar en el continente. En España, en 2008 se presentaron 4.000 peticiones de asilo, sólo se han concedido cien. Una noticia positiva, sin embargo, es que el Tribunal Supremo ha concedido asilo a una mujer de Nigeria víctima de violencia de género, lo que es un paso muy importante en la lucha contra la violencia contra las mujeres, un problema de gran magnitud. Cabe recordar que sólo en España fueron asesinadas 70 mujeres en 2008.
Muchos conflictos, como el de Darfur o el Congo, persisten y siguen provocando miles de víctimas inocentes. ¿Los señores de la guerra son más impunes que nunca?
No. La Corte Penal Internacional (CPI) ha dictado una orden de busca y captura contra el presidente de Sudán, Omar al Bashir, por crímenes de guerra, crímenes de lesa humanidad y genocidio. Es una medida sin precedentes puesto que se aplica a un Jefe de estado en ejercicio, que puede extenderse a otros conflictos y que demuestra que los criminales de guerra no quedarán impunes. Es un paso de gigante.
¿Ante la vulneración de los derechos humanos y los crímenes de guerra, falta liderazgo mundial?
Los Estados miembros del G-20 `[los países más ricos del mundo], que son los que deberían dar ejemplo, deben enfrentarse a su doble moral en relación con los derechos humanos. Dentro del G-20, hay todavía muchos países como EEUU y China que aún aplican la pena de muerte. Según cálculos de Amnistía Internacional, se impusieron como mínimo 7.000 penas de muerte en todo el mundo en el año 2008. En EEUU, durante el año se ejecutó a 37 personas y a lo largo de este año ya han sido 24. Otro caso es el de Arabia Saudí, donde al menos 102 personas fueron ejecutadas en 2008.
¿Y el caso de Rusia?
La situación no mejora. El gobierno ruso ejerce una coacción descomunal hacia la oposición y no se persiguen los asesinatos contra defensores de los derechos humanos. El ataque en pleno Moscú en el que murieron el abogado Stanislav Markelov [representante de la familia de Elsa Kungayeva, una muchacha chechena secuestrada y asesinada por el Coronel Yuri Budanov en marzo de 2000] yla periodista Anastasia Baburova, se ha saldado con total impunidad. También es flagrante el caso de Chechenia: de cien sentencias condenatorias en el Tribunal de los Derechos Humanos por asesinatos y torturas, Rusia no ha respondido a ninguna.
La impunidad ante los crímenes de guerra no tiene fronteras, como demuestra el ataque de Israel sobre Gaza…
Durante la ofensiva murieron 1.400 palestinos, incluidos cerca de 300 niños y niñas, y resultaron heridas otras 5.000 personas. Pese a las peticiones de las ONG, la comunidad internacional no ha presionado suficientemente al gobierno israelí para investigar los ataques, ni siquiera contra edificios y miembros de la ONU. Algunos soldados han reconocido que aceptaron ordenes de disparar a cualquier persona, pero Israel no ha condenado a nadie.
¿Obama abre un nuevo ciclo para los derechos humanos?
Fruto de la presión internacional y de entidades como Amnistía, Obama está cerrando Guantánamo, lo que es una buena decisión. Pedimos para estos presos lo que reclamaríamos para cualquier otro inculpado: que sepan de qué se les acusa, que sean juzgados de acuerdo a la normativa internacional y que sean condenados o liberados tras el juicio. No puede ser que los tengan siete años encerrados sin ninguna acusación formal. De hecho, muchas de las acusaciones se han obtenido a través de torturas, lo que es nulo desde un punto de vista jurídico. Además, muchos de los presos no tienen nada que ver con los talibanes o Al Qaeda. EEUU pagaba a los señores de la guerra por cada prisionero y se capturó a muchos inocentes.
Obama, no obstante, se niega a publicar las fotos de las torturas ¿Ha decepcionado?
De momento no. Obama ya ha prohibido las torturas que se legalizaron en la era Bush, como el waterboarding –simulacro de ahogamiento. Ahora, tendría que perseguir a los torturadores y a sus ideólogos. Apoyamos una investigación que llegue a los culpables de los abusos cometidos contra los Derechos Humanos en la lucha contra el terrorismo. Sería muy bueno que los culpables de los abusos de Guantànamo, estén al nivel que estén, fueran llevados ante la Justicia.
Hablando de torturas, en el informe se criticaba la lentitud de la investigación sobre las denuncias de maltratos a detenidos en la comisaría de los Mossos en Les Corts, en Barcelona. En un incidente ocurrido en marzo de 2007, varios agentes propinaron golpes y patadas a un detenido. Finalmente, la sentencia les ha dejado libres. ¿Cuál es tu opinión?
Amnistía no opina sobre las decisiones judiciales. Nosotros pedimos que se investiguen los supuestos casos de maltrato en las comisarías y que los juicios sean transparentes e imparciales. Para evitar situaciones de este tipo, reclamamos la creación de un organismo independiente, como ya ocurre en Reino Unido y Holanda, que indague si los agentes vulneran los derechos de los detenidos.
¿Otra medida son las polémicas cámaras?
Sí, fue una de tantas propuestas de Amnistía y la aplaudimos: se trata de una medida pionera en Catalunya y Euskadi. De momento no están en todas las comisarías de los Mossos pero pronto lo estarán. No obstante, pedimos que además de imagen tengan sonido y que las cintas no sean destruidas hasta al cabo de seis meses. Las cámaras son buenas tanto para los detenidos como para los agentes, que evitan que se presenten falsas denuncias contra ellos por abusos. Desde que se instalaron han disminuido las denuncias de los detenidos contra la policía autonómica catalana.
Da la sensación de que determinados medios ponen la lupa sobre los Mossos y se pasa por alto las torturas a los detenidos en Euskadi o a los inmigrantes…
No puedo opinar de lo qué hacen los otros, pero Amnistía actúa por igual en todas partes. Por lo que respecta a Euskadi, condenamos los ataques de ETA y a la vez exigimos que se investiguen los supuestos casos de torturas, como el caso de Igor Portu, cuyo juicio ya ha empezado. Por otro lado, ponemos de manifiesto de que en España continuaron denunciándose casos de tortura y otros malos tratos con un componente racista.
¿Así, la tortura no se ha erradicado de las comisarías españolas?
Todavía no. No se tortura de forma sistemática, pero observamos de forma preocupante que muchos casos no se denuncian por miedo de la victima. Muchos inmigrantes no denuncian por miedo a ser expulsados.