El punk despierta actualmente un gran interés. God Save the Queen, el clásico de los Sex Pistols, se colocó en el primer puesto de las listas de singles del Reino Unido durante el Jubileo de Platino de la Reina Isabel. Este hito se produce 45 años después de la publicación original de la canción, que curiosamente no tuvo tanto éxito en su momento, el Jubileo de Plata en el verano de 1977.
El famoso director Danny Boyle también ha dramatizado la vida de la banda en su serie Pistol, que recorre la evolución de los Sex Pistols y el movimiento punk del Reino Unido que surgió en Londres en la década de 1970.
La serie, basada en la autobiografía del guitarrista de los Pistols, Steve Jones, ha sido objeto de controversia, incluyendo batallas legales con el antiguo líder de la banda, John Lydon, que intentó impedir el uso de su música. El cantante definió la serie como “la mierda más irrespetuosa que he tenido que soportar”.
Casi todos los géneros de la música popular tienen connotaciones subculturales, es decir, que tienen impacto en, por ejemplo, la moda y los valores morales. Pero podría decirse que ningún otro género tiene una vigencia subcultural más fuerte que el punk. El músico y cantante de la banda Talking Heads, David Byrne, ha declarado que “el punk se definía por una actitud más que por un estilo musical”.
Pero, ¿qué significaba ser punk?
Rechazo del establishment musical y de la autoridad política
A diferencia del rock progresivo y del glam que lo precedieron, el punk era antisistema, antirreglamentario y anticomercial. Surgió entre principios y mediados de los años 70, cuando la música se había vuelto menos accesible y, para la siguiente generación de público, menos reconocible. La eclosión del punk coincidió con un periodo de declive económico y creciente malestar social. Era una época en la que la juventud sentía que su futuro era bastante sombrío.
Romper con la actitud intelectual y elitista era fundamental para la actitud punk. Los nombres de las primeras bandas punk británicas, como The Clash, The Stranglers y The Damned (que significan El Choque, Los Estranguladores y Los Malditos, respectivamente), servían como declaraciones tanto de beligerancia como de provocación.
New Rose de The Damned fue considerado uno de los primeros himnos punk del Reino Unido. Se publicó en octubre de 1976. El single incluía una batería agresiva y enérgica (tocada por el curiosamente llamado Rat Scabies), una guitarra rítmica cruda y distorsionada (que en ocasiones cambiaba a guitarra principal), apuntalada por el bajista que atacaba las notas fundamentales de los acordes de la guitarra. Las secuencias de acordes eran sencillas y a veces discordantes a través de progresiones menos obvias. Las voces se sitúan en un punto intermedio entre lo cantado, lo hablado y lo gritado.
Temáticamente, las letras del punk eran a menudo antagónicas, desafiando las “normas” de la sociedad. Canciones como Anarchy in the UK (1976), de los Sex Pistols, daban voz a una generación joven que se sentía privada de derechos en su propio país.
El punk nunca fue limitante y no estuvo sujeto a prejuicios de género como los anteriores tipos de música rock. Muchas mujeres colaboraron y participaron activamente, entre las que destacan Susan Ballion, alias Siouxsie Sioux, que lideró el emblemático grupo punk Siouxsie and the Banshees, y el icono de estilo Pamela Rooke, alias Jordan (la Reina del Punk).
Cabe destacar que al otro lado del Atlántico también existía una floreciente escena punk que precedió al movimiento punk del Reino Unido. El club CBGB de Nueva York, abierto por Hilly Kristal en 1973, sirvió de centro neurálgico para que la escena cristalizara. The Ramones, Television, The Voidoids, Blondie, Patti Smith Group y Talking Heads dieron sus primeros conciertos allí y luego alcanzaron la fama.
¿Qué significaba el punk para los punks “originales”?
El periodista musical John Robb, que también fue vocalista del grupo de punk rock Goldblade y bajista y vocalista del grupo post-punk The Membranes declaró:
“Es imposible definir el punk. Es subjetivo y significa algo diferente para cada persona… Es excitante, confuso, estimulante, una granada a punto de explotar, intelectual pero no académico, revolucionario. Hizo un agujero en el tejido de la cultura pop y todos nos colamos por él”.
El punk era multifacético y también era muchas cosas para mucha gente. Algo que se sentía, capacitador, potenciador, contradictorio, que se manifestaba a través de la expresión individual y colectiva… Pero quizás para entender lo que era en un principio, había que haber estado allí.
Los orígenes del músico Peter Hook están firmemente arraigados en el punk, en particular en un concierto de los Sex Pistols en el Lesser Free Trade Hall de Manchester en junio de 1976. Al parecer, sólo asistieron unas 40 personas, pero muchas de ellas se convirtieron en figuras culturalmente relevantes en la música británica. Fue este evento el que inspiró a Hook al día siguiente para comprar un bajo y urdir un plan para formar una banda. Se convertiría en miembro fundador de Joy Division, que se transformaría en New Order tras la muerte del cantante Ian Curtis.
Para el pionero de la música dance y cofundador de 808 State, Graham Massey, una de sus primeras bandas fue el grupo punk Danny and the Dressmakers. Massey ha descrito cómo se le negó el acceso a la educación musical en la escuela:
“Con rebeldía, entré en la música en la época del punk, cuando no era necesaria ninguna habilidad musical. Había una gran voluntad de simplemente lanzarse y hacer ruido”.
El hecho de que no se requiriera formación musical ni virtuosismo significaba que el punk no estaba confinado a las élites musicales y a las instituciones con mucho dinero, como había ocurrido en gran medida en el pasado. Massey también habla de “la emoción creativa” de la “reinvención” tras el desmantelamiento del establishment musical.
El espíritu del “hazlo tú mismo” estaba muy presente en el movimiento. Los punks creaban fanzines, los grupos creaban sus propios sellos y la gente se hacía su propia ropa como forma de expresión cultural. El grupo de Manchester The Buzzcocks y su representante, Richard Boon, crearon New Hormones, el primer sello independiente de punk rock del Reino Unido. También fueron los responsables de organizar el concierto de Sex Pistols en Manchester al que asistió Hook, entre otros.
A partir de finales de los años 70, el punk perdió su impulso cultural inicial y se fragmentó (como ocurre siempre con las olas musicales y culturales) en estilos como el anarcopunk, el street-punk y el punk gótico. Estos movimientos dieron lugar posteriormente a otros nuevos (incluida la nueva ola). Sin embargo, el propio término punk sigue utilizándose para describir el inconformismo y la subversión.