Poco o nada se ha hablado este pasado 8 de marzo de la situación que viven las mujeres palestinas sitiadas en Gaza. Peor aún lo tienes las presas palestinas sometidas al abandono absoluto por parte de las autoridades de Israel. Es el caso de las 29 mujeres recluidas en los penales israelíes, que ven como sus derechos más básicos son negados a diario, sufriendo un vilipendio permanente.

De esas 29 mujeres, dos son menores de edad, ambas de 16 años, mientras que otras 15 padecen diversos problemas de salud, seis de las cuales son madres. Según los informes de diversos grupos de apoyo y organizaciones humanitarias, una de las presas está encarcelada sin haber sido juzgada y se encuentra bajo detención administrativa.

Ocho años en prisión con el cuerpo quemado

Israa Jaabis, de 36 años, fue arrestada por las fuerzas israelíes en otoño de 2015 después de que su cocina de gas defectuosa explotara en su automóvil cerca de un puesto de control israelí en Cisjordania. La policía israelí la acusó de intentar atentar contra las autoridades israelíes; sin embargo, no ha habido ninguna evidencia que respaldase tales afirmaciones, y con Jaabis negando las acusaciones hasta hoy.

Israa Jaabis sufrió en el accidente graves quemaduras que le afectaron al 65 por ciento de su cuerpo, pero las autoridades israelíes le negaron la atención médica necesaria y prohibieron a los médicos en 2022 realizar una cirugía para permitirle respirar por la nariz.

Confiscaciones de bienes y dinero

La situación de estas mujeres se ha dado a conocer una semana después de que el gobierno israelí confiscara las propiedades y cuentas bancarias de varios prisioneros palestinos liberados. El proceso gradual, pero deliberado, de confiscación de dinero y tierras palestinas por parte de Israel, junto con obligar a los palestinos a vivir bajo la ocupación militar israelí, ha formado el sistema que el grupo israelí de derechos humanos B’Tselem ha categorizado como ‘apartheid’, una consecuencia secundaria de la ocupación

Según el abogado de derechos humanos Abdel Nasser Farwana, en declaraciones a la agencia de noticias WAFA, más de 600 presos políticos palestinos padecen enfermedades agudas y corren el riesgo de morir. Según la agencia, actualmente hay 4.450 palestinos recluidos en prisiones israelíes, 160 de ellos menores de edad, así como 200 presos con enfermedades crónicas. Israel es el único país del mundo que procesa a los niños en tribunales militares, privándolos de sus derechos legales básicos.

Los grupos de derechos humanos estiman que Israel ha encarcelado a más de 1 millón de palestinos desde 1967, incluidos mujeres y niños. Algunos están recluidos indefinidamente sin juicio debido a leyes represivas que permiten un estado policial basado en la etnia.

Comparte: