Actualmente, el mercado laboral español, el sector de las tecnologías de la información (TIC), sigue haciendo una apuesta sólida por el teletrabajo. Según encuestas de medios y organismos especializados, más del 60% de los puestos para este sector, ofrecen esta modalidad de trabajo.
De hecho, aunque en el panorama general el trabajo en remoto se encuentra en su punto más bajo desde 2020, con el estallido de la pandemia y el auge de esta modalidad, casi un 90% de los empleados del sector TIC trabaja desde su casa.
De esta forma, mientras se ralentiza el teletrabajo en la mayoría de los sectores, las compañías de tecnología se alzan como la gran alternativa para encontrar trabajo bajo esta modalidad.
Quizá sea un buen momento para los profesionales de este sector que deseen dar un salto hacia esta forma de trabajo. Para ello, lo más recomendable será crear un nuevo curriculum vitae en Word o PDF, e iniciar la búsqueda.
Las TIC se consolidan en el teletrabajo
Un 61% de las ofertas de empleo que se manejan en el sector tecnológico ofrece teletrabajo a sus empleados, consolidando a las TIC como el sector que cuenta con mayores solicitudes de esta modalidad de trabajo, en toda España, según un informe de la consultora Keepler Data Tech.
En este sentido, el sector tecnológico destaca para Keepler Data Tech, no solo por concentrar la mayor oferta de teletrabajo del país, sino por formar parte de un reducido grupo de 4 sectores en los que más del 80% de las compañías valoran positivamente las cualidades del trabajo en remoto, de cara a la productividad.
Algo que también es reforzado por el último informe de teletrabajo en España por parte del Observatorio Nacional de Tecnología y Sociedad (ONTSI), el cual refleja que entre los 4 sectores económicos que admiten esta modalidad de trabajo, las empresas de TIC destacan con un 87,8% de los empleados con acceso a trabajo en remoto.
A estas les sigue el sector inmobiliario, finanzas y seguros y con un 80,7% figuran las actividades profesionales, científicas y técnicas, según datos de este informe.
Una realidad que la consultora Keepler Data Tech, que a su vez es una compañía tecnológica especializada en analítica avanzada de datos, atribuye a las características de los profesionales de las TIC y al tipo de trabajo que efectúan.
«En las empresas tecnológicas quizás es más sencillo implementar y mantener este modelo porque los profesionales están más habituados a herramientas y entornos digitales que facilitan el trabajo a distancia, por lo que el impacto en el desarrollo de nuestras tareas, de cómo era antes a ahora, es mínimo», detalló la consultora en declaraciones obtenidas por Europa Press.
Todo lo que sube tiene que bajar
Los datos anteriores reflejan un incremento inédito de la modalidad de trabajo a distancia con respecto a lo ocurrido antes de pandemia de la COVID-19. Por ejemplo, hasta marzo de 2020 el 74,5% de adultos en España nunca había teletrabajado.
Con la irrupción del coronavirus y las restricciones de movilidad internas y externas, el 31,7% de la población ocupada empezó a trabajar de manera remota.
No obstante, el estudio también refleja que tras el alza estrepitosa de los puestos de teletrabajo al principio de la pandemia, solo el 14,1% de los empleados españoles continúan trabajando en esta modalidad a tiempo completo.
Con el avance de la pandemia, el teletrabajo fue perdiendo horas en diversos tipos de empresas en España.
Por ejemplo, de las 16,7 horas promedio que se trabajaba a distancia en verano de 2020, cayó a 15,1 en la primavera de 2021.
Para aquel entonces, la modalidad del teletrabajo ya había evidenciado un bajón en España a solo dos días, o menos, a la semana, en promedio.
La actualidad tampoco parece prometedora para el teletrabajo en nuestro país, de acuerdo con otro estudio de Adecco, que refleja que el 27% de las compañías del país no ofrecen ni un día de trabajo a distancia a sus empleados.
Según la consultora, con la “vuelta a la normalidad” algunas empresas han retomado la realidad y modalidad de trabajo de 2019.
En este contexto, las empresas del sector distribución, que cuentan con menos de 100 empleados, consideradas como pequeñas empresas, figuran entre las que menos cuentan con políticas de trabajo a distancia.
La situación cambia en el caso de las grandes empresas de servicios que cuentan con más de 500 personas en plantilla.
Por otro lado, un 47 % de todas las empresas españolas ha implementado la modalidad de trabajo en remoto en alguno de los puestos en su estructura.
¿Se gastan menos recursos con el teletrabajo?
Si bien en teoría se hablaba de que trabajar en remoto podría reducir costes para el empleado, en la práctica no necesariamente es así.
«Si bien a corto plazo el teletrabajo podría reducir el número de viajes de casa al trabajo, a largo plazo podría aumentar las distancias de viaje si las personas se trasladan lejos de la oficina para evitar los altos alquileres y el alto coste de vida urbana», señala la agencia de la UE, Eurofound.
También está la cuestión del impacto sobre el clima. Dado que si la mayor parte del trabajo de una persona se realiza en el hogar, forzosamente aumentarán el uso de energía para calefacción, refrigeración, iluminación, Internet, cocina, entre otros.
Tras su análisis, Eurofund resaltó que calentar 100 hogares puede ser mucho más costoso y menos eficiente que calentar grandes oficinas.
Y, con las modalidades mixtas que están presentando algunas empresas, estamos ante un panorama en el que un consumo sustituye a otro, si no que se añade al mismo, según la agencia europea.
Desde su punto de vista, la idea sería “promover el uso flexible del espacio en las oficinas para evitar la calefacción, la refrigeración o la iluminación de áreas no utilizadas o escasamente utilizadas cuando se espera una baja presencia de empleados».
Este artículo ha sido redactado y/o validado por el equipo de redacción de Revista Rambla.