El Juzgado de Instrucción número 9 de Málaga no ha permitido finalmente este lunes la visita de la juez argentina María Servini de Cubría, encargada de la querella contra los crímenes del franquismo, al antiguo cementerio de San Rafael de la capital.
El Juzgado de Instrucción número 9 de Málaga no ha permitido finalmente este lunes la visita de la juez argentina María Servini de Cubría, encargada de la querella contra los crímenes del franquismo, al antiguo cementerio de San Rafael de la capital.
La magistrada tenía previsto realizar una inspección, acompañada por historiadores, en el cementerio de San Rafael, en cuyas tapias fueron fusilados más de 4.400 personas durante la Guerra Civil y el franquismo, y donde se levanta un mausoleo con forma de pirámide en el que aparecen los nombres de los difuntos, y donde, además, en su cripta están enterrados los restos de 2.880 víctimas una vez que han sido recuperados de la que es la mayor fosa común de España.
Según ha informado a Europa Press el abogado de los querellantes, Máximo Castex, la autoridad judicial ha informado este mismo lunes de que la visita no era autorizada, “después de tenernos aquí –en el cementerio– desde las 09.00 horas”, y de haber estado, según ha explicado, “parte de la pasada semana intentando coordinar la visita”.
La explicación que han recibido, según Castex, es que “es una medida que piensa realizar el propio juzgado el 18 de junio”. Así, el letrado ha lamentado que Servini no vaya a ser recibida en el camposanto, ya que la inspección por parte del juzgado de Málaga, “amén de que se realice”, a su juicio, “pierde todo sentido”.
En este punto, el abogado ha recordado que el objetivo era que la juez tomara “contacto directo e hiciera una inspección ocular” de la zona donde tuvieron lugar los hechos y de las fosas.
“Eso no se suple con un informe que le remitan, por más que esté ilustrado con fotos y vídeos, por mucho que esté muy bien documentado”, ha expuesto, agregando que “es una noticia sorprendente e ilógica, que no tiene mucho asidero”.
De este modo, ha reiterado que “el momento para hacerlo es cuando la juez que instruye e investiga el caso tome intervención directa por sus propios sentidos, y le expliquen cómo fueron las fosas y cuántos cuerpos están exhumados y le ilustren respecto a lo sucedido”.
“NO HA SIDO EL MEJOR DE LOS TRATOS”
Por otro lado, el letrado ha mostrado su “sorpresa” por que la autorización judicial requerida se haya negado, destacando que “sería el segundo juzgado que no colabora, junto con Miranda de Ebro (Burgos)”, y a diferencia de lo sucedido en Sevilla capital y en las localidades sevillanas de Marchena y Carmona.
“No ha sido el mejor de los tratos, con una respuesta que nunca llegaba, siempre dilatada, para luego informar de que la medida no se iba a realizar”, ha criticado.
En este sentido, Castex ha insistido en que la visita de la juez era “una medida judicial simple”, en referencia a que “se han podido hacer otras cosas más complejas como tomar declaraciones”.
La magistrada investiga los crímenes cometidos por la dictadura franquista desde el 18 de julio de 1936 hasta el 17 de junio de 1977, tras la querella que se presentó en los tribunales de Buenos Aires.
