“¿Por qué no se impulsa un embargo total de armas a Israel?”. Fue la pregunta que la periodista Àngels Barceló realizó al ministro de Exteriores, José Manuel Albares, durante una entrevista en la Cadena SER en enero de 2024. La respuesta fue clara: “Desde luego, es algo que España ha realizado; desde el mismo día 7 de octubre de 2023 no se produce ninguna operación de venta de armamento a Israel”. Un nuevo informe del Centre Delàs de Estudios por la Paz, sin embargo, desmiente las palabras del ministro y asegura que España ha seguido importando y exportando armamento a Israel a pesar de las masacres que el Gobierno sionista está cometiendo contra la población gazatí.
El documento que ha presentado el Centre Delàs detalla que el ejecutivo de Pedro Sánchez ha seguido adjudicando contratos públicos a empresas de seguridad y defensa israelíes (o a sus filiales españolas) por valor de 1.027 millones de euros desde el 7 de octubre de 2023. Por ello, esta entidad independiente considera que «las relaciones militares de España con Israel no se han alterado de manera sustancial» a pesar de «la extrema gravedad» de las actuaciones llevadas a cabo en Gaza, donde ya han sido asesinadas más de 38.000 personas, según datos del Gobierno gazatí; una cifra que la revista The Lancet eleva a 186.000 muertos.
Entre las importaciones a España, destacan el sistema de lanzacohetes SILAM o los misiles SPIKE, ambos publicitados como «probados en combate», lo que demuestra que las relaciones comerciales con Israel no han sido suspendidas.
Como tampoco se han paralizado las exportaciones españolas hacia el Estado gobernado por Benjamin Netanyahu. Según el Centre Delàs, solo en noviembre de 2023, España vendió municiones a Israel por valor de 987.000 euros. Lo hizo Nammo Palencia, la filial de la multinacional noruego-finlandesa Nammo, a la empresa Elbit Systems, una de las principales proveedoras del Ejército israelí.
Asimismo, el pasado diciembre se vendieron más municiones y proyectiles, aunque en este caso con el objetivo de ser reexportados a Filipinas. De la misma forma, España también ha servido a Israel material relacionado con vehículos blindados en octubre y noviembre de 2023, y en enero y febrero de 2024, aunque en estos dos últimos meses el destino final era Filipinas.
Estas ventas de armamento desmienten lo afirmado por Albares sobre el comercio de armas entre España e Israel. Alejandro Pozo, investigador del Centre Delàs y coautor del estudio, alerta de que «es difícil saber qué es lo que ha exportado España»: «Pero lo que hemos podido encontrar e identificar es muy preocupante. El Gobierno debería ser transparente y detallar las exportaciones que ha realizado España desde el 7 de octubre de 2023», añade.
En respuesta a esta situación, el Centre Delàs y la campaña Fin al Comercio de Armas con Israel han formulado una serie de demandas. Entre ellas, destacan la modificación de la normativa española de control del comercio de armamentos para permitir embargos específicos, la revocación de autorizaciones vigentes con Israel para el material de defensa y doble uso, y una mayor transparencia en las transacciones armamentísticas.
Eduardo Melero, también investigador del Centre Delàs y coautor del informe, cuestiona la efectividad de la legislación actual si no se aplica en situaciones críticas como la de Gaza: «Es evidente que la protección de los Derechos Humanos no está en la agenda del Gobierno», denuncia.
El estudio señala, además, que en un contexto global de tensiones España exportó armas a 109 países entre enero de 2022 y junio de 2023, por un valor total de 5.845 millones de euros. El informe remarca como «especialmente preocupante que en el primer semestre de 2023, más de la mitad de las autorizaciones para exportar material militar español tuviera como destino países de Oriente Medio».
