Los agentes e ingredientes antimicrobianos se han utilizado durante miles de años, incluso mucho antes de que se supiese la existencia de microorganismos responsables de enfermedades. De hecho, cuando se descubrió un hombre congelado en los Alpes con más de 5300 años de antigüedad y en un estado de conservación perfecto, se encontraron también entre sus pertenencias varios frutos que si bien para el momento del descubrimiento ya se conocían sus propiedades antimicrobianas, antiparasitarias y antifúngicas, solo deja en evidencia que los humanos tienen un conocimiento empírico acerca de los beneficios y las propiedades de algunas plantas. Actualmente la salud es una prioridad, y ante la reciente pandemia por COVID-19, que aún ha dejado algunas cicatrices en la sociedad, la importancia de contar con sustancias capaces de protegernos ante microorganismos.

¿Qué son los agentes antimicrobianos?

Un ingrediente antimicrobiano es un elemento químico que tiene propiedades de destruir microorganismos o, al menos, detener su crecimiento. Existen dos grandes usos para este tipo de sustancia:

  • Para las formulaciones en las que se necesite de una actividad antimicrobiana
  • Para garantizar que las formulaciones logren conservarse por más tiempo y se evite la proliferación de microorganismos

Existen muchos ingredientes con cualidades antimicrobianas, pero actualmente se sabe que la plata es el mejor de todos. Esto gracias a su capacidad para eliminar tanto bacterias Gram positivas como Gram negativas, hongos, mohos, levaduras e incluso se ha demostrado que presenta actividad viricida. Además, a diferencia de la mayoría de antibióticos disponibles en el mercado, la plata no se caracteriza por hacer que los microorganismos crean resistencia a sus propiedades. Los ingredientes antimicrobianos se pueden caracterizar de diferentes formas, pero la más general y conocida es:

  • Desinfectantes o blanqueador: ingredientes capaz de destruir diferentes familias de microbios y así reducir el riesgo de contraer enfermedades;
  • Antiséptico: una sustancia que se puede aplicar sobre el tejido vivo, destruyendo los microorganismos patógenos y reduciendo su proliferación;
  • Antibióticos: medicamentos que se encargan de destruir bacterias dentro del cuerpo, evitar la producción de toxinas y más.

¿Cuál es la diferencia entre antimicrobiano y antibacteriano?

Los aditivos antibacterianos son los encargados de prevenir o eliminar las posibles bacterias que se encuentran en casi cualquier superficie, por lo que en su etiqueta se expone completamente que su uso es para desinfectar y destruir bacterias. Por otro lado, las sustancias o ingredientes antimicrobianos, también conocidas en menor popularidad como biocidas, eliminan o disminuyen la propagación de microorganismos, desde bacterias y virus hasta hongos y parásitos. Estos también son los encargados de mantener la salubridad de los alimentos y del agua potable.

Si bien ambos ingredientes van dedicados a ámbitos bastante diferentes, ambos forman parte esencial de las técnicas de asepsia, antisepsia, higiene y salubridad.

¿Para qué se utilizan antimicrobianos?

Especialmente después de la pandemia que azotó a la humanidad en 2020, las áreas de trabajo implementaron en su arsenal productos con agentes antimicrobianos con el objetivo de mantener sus establecimientos limpios, intentando reducir a toda costa el contagio de algún tipo de enfermedad.

Productos de limpieza

Limpiar está bien, pero si lo que buscamos es higienizar realmente las superficies de las encimeras, la cocina, el dormitorio o el baño, entonces tendremos que recurrir a productos con ingredientes antimicrobianos. Emplear cualquier otro producto básico nos ayudará a deshacerse del polvo, pero no de las bacterias que se mantienen fuertemente adheridas a la superficie de los objetos.

Hospitales y centros de salud

No hay duda que los centros de salud pueden ser un foco de innumerables enfermedades si no se emplean agentes antimicrobianos adecuados para la limpieza de suelos, pinturas, prótesis, dispositivos médicos, equipos de cirugía, etc. debido a la constante interacción con pacientes contaminados.Para mantener las áreas tan limpias como sea posible se emplean algunos productos con una brutal capacidad para destruir microorganismos:

  • Hipoclorito de sodio: después de haber limpiado con agua y jabón, se emplea esta sustancia para acabar con cualquier tipo de microorganismo.
  • Formaldehídos: es un ingrediente con una potente capacidad germicida, por lo que suele utilizarse en forma de aerosol para desinfectar la superficie de objetos y estructuras.
  • Clorhexidina: es uno de los mejores agentes antimicrobianos gracias a su potencial para eliminar hongos y virus, por lo que generalmente se emplea en los equipos utilizados en el quirófano. Sus presentaciones son de lo más variado, pudiendo encontrarse desde geles antibacteriales hasta jabón sanitario.
  • Alcoholes: sin duda son uno de los productos más utilizados para la desinfección sanitaria, y actualmente es el favorito en hogares, empresas y entidades que busquen mantener limpias sus instalaciones.

Industria Alimentaria

También es necesario desinfectar bandejas, cuchillos, carritos de supermercado y demás elementos que pueden actuar como fómites y contagiar a cualquier individuo con alguna enfermedad. Por otro lado, las verduras, frutas y ciertos alimentos deben someterse a procesos antimicrobianos con los que se evite la propagación de enfermedades entre los alimentos contaminados, para estos casos se suele emplear ácido peracético, agua oxigenada y cloruro de benzalconio.

Este artículo ha sido redactado y/o validado por el equipo de redacción de Revista Rambla.

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