En una marea de color amarillo, con el lema ‘SOS. Educación Pública de Calidad’, los miles de manifestantes han iniciado su marcha de protesta en la plaza de la Universidad con la intención de finalizarla en la plaza de Sant Jaume. Paralelamente se han formado marchas alternativas con pancartas distintas a la oficial, como las de los estudiantes, que han tachado a los sindicatos de cómplices del poder..
La manifestación, encabezada por una pancarta que dice «Por la cohesión social. Ni LOMCE ni recortes», se han sumado también algunos docentes de escuelas concertadas y de la universidad privada Ramón Llull, además de colectivos vinculados al movimiento 15M, como los ‘yayoflautas’ o miembros de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca.
El sol ha acompañado la manifestación, que se ha desarrollado de forma festiva y a la que han asistido muchos niños que no han ido a clase sino que han acompañado a sus padres a la protesta porque, según se podía leer en sus camisetas, ‘La educación es el futuro’.Lla portavoz de Ustec·Stes, Rosa Cañadell, ha destacado que la protesta ha aglutinado no sólo a profesores, sino también a las familias: «Es toda la sociedad la que se da cuenta de lo importante que es que no se desmantele el sistema educativo».
La Lomce convierte a los ciudadanos en usuarios deun servicio que se puede mercantilizar», ha criticado la portavoz de Fete-UGT, Roser Font, que ha agregado que la reforma es ideológica y privatizadora.
Precisamente, este viernes tiene que aprobarse el anteproyecto de la Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa (Lomce), sobre lo que Font ha dicho que el sistema no necesita un cambio legislativo sino más inversión.
Los universitarios han protagonizado una manifestación alternativa, pero han encabezado la marcha de la protesta sindical hasta llegar hacia las 14 horas ante el Palau de la Generalitat, en la plaza de Sant Jaume. En su caso, la protesta ha empezado a las 11.15 horas en la avenida Diagonal, cortando el tráfico y con un fuerte dispositivo policial que les seguía de cerca.
Llegados a plaza Sant Jaume, se han producido momentos de tensión, puesto que los estudiantes han lanzado botellas de agua de plástico, latas y algún objeto a la decena de Mossos d’Esquadra que custodiaban el edificio protegidos con cascos. Hacia las 14.30 horas, muchos han empezado a abandonar la plaza pero algunos se han quedado sentados en círculos.
Las protestas, las aulas vacías y los encierros en algunos centros se han repetido por toda Cataluña y el resto de España. La Plataforma por la Escuela Pública, que engloba a colectivos de padres, profesores y estudiantes, ha calificado de «rotundo éxito» la convocatoria de huelga en todos los niveles de la enseñanza que se celebra este jueves y estima que el seguimiento es superior al de anteriores protestas.
Desde Educación Infantil hasta la Universidad. La convocatoria de huelga en educación para el 9 de mayo es el punto culminante del calendario de protestas propuesto por la Plataforma Estatal por la Escuela Pública , formada por asociaciones de padres, de alumnos y los sindicatos CC OO, STES, FETE-UGT y CGT, CEAPA, el Sindicato de Estudiantes y los Movimientos de Renovación Pedagógicas. El pasado 22 de mayo, hace casi un año, organizaron una huelga similar también en la educación y por los mismos motivos.
La confederación de padres de alumnos mayoritaria en los colegios concertados, CONCAPA, no se une a la protesta, a pesar de que “manifiesta su descontento con el planteamiento actual de la política educativa del gobierno, que considera manifiestamente insuficiente y raquítica, además de ver cómo se desarrolla con pasmosa lentitud”. Eso sí, no descartan llevar a cabo otras acciones que no impliquen pérdida de horas lectivas.
El sindicato de docentes AMPE tampoco acudirá a la huelga y ha asegurado que “agotará el proceso negociador para no castigar más al profesorado ni a las familias con una nueva huelga general».
El ministro de Educación, José Ignacio Wert, ha comentado que no le parece «razonable» una huelga y que las peticiones de retirada de la LOMCE deberían canalizarse a través de las enmiendas de los grupos parlamentarios cuando el proyecto llegue al Congreso.
Este artículo ha sido redactado y/o validado por el equipo de redacción de Revista Rambla.