La Secretaría General de la ONU ha informado de que el número de desplazados internos en Siria ha ascendido a 370.000 personas desde que el miércoles de la semana pasada la coalición Organismo de Liberación del Levante —grupo respaldado por Turquía— iniciara una ofensiva contra posiciones del gobierno del presidente Bachar al Asad.

«Desde la escalada de las hostilidades, 370.000 hombres, mujeres y niños han sido desplazados, incluidos 100.000 que ya han abandonado sus hogares en más de una ocasión. La mayoría de los desplazados son mujeres y niños«, ha indicado el portavoz de la Secretaría General, Stéphane Dujarric.

Asimismo, ha considerado «muy preocupante la situación sobre el terreno» desde que la coalición insurgente, creada en 2016 tras escindirse del Frente al Nusra —otrora filial de AlQaeda en Siria—, ejecutara un sorprendente despliegue que el Ejército sirio trata de repeler con la ayuda de Irán y Rusia.

En apenas nueve días ya controlan la provincia de Idlib —bastión opositor—, Alepo —la segunda ciudad del país—, han tomado Hama —la cuarta urbe más grande de Siria, situada más hacia el centro de su territorio— y se encuentran a las puertas de la capital provincial Homs.

«Nuestros colegas humanitarios de ACNUR y ONG locales nos están diciendo que decenas de miles de personas han llegado ya al noreste de Siria (…) Estos refugios se están llenando en cuanto a las familias se les asignan emplazamientos a los que acudir», dijo el portavoz de António Guterres.

Y añadió: «Mientras tanto, la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios advierte de que, a medida que las hostilidades en el norte se intensifican y se extienden a otras partes del país, los civiles, incluidos los trabajadores humanitarios, se enfrentan a graves amenazas para su seguridad«.

Por otro lado, el Ejército sirio señaló hoy que sus unidades están «presentes» en la ciudad de Homs y en su periferia, y que ha reforzado sus tropas para contener el avance de los insurgentes islamistas.

En caso de que la ciudad de Homs caiga en manos de los rebeldes, Damasco (la capital del país) quedaría aislada, pues ya no podría tener conexión terrestre con la costa mediterránea debido a que la autopista M-5 —columna vertebral que conecta de norte a sur Siria— pasa por la propia Homs.

Este artículo ha sido redactado y/o validado por el equipo de redacción de Revista Rambla.

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