Mónica del Raval, conocida como la reina del Raval por su relación con el barrio barcelonés y célebre por su aparición en documentales de cine y televisión, ha muerto este martes a los 60 años. Nacida en 1964 en Villamanrique, Castilla-La Mancha, Mónica del Raval vivió gran parte de su vida en Barcelona, donde ejerció la prostitución durante tres décadas. Ramona Coronado, nombre de nacimiento de Mónica, adquirió notoriedad entre el público en general en 2009 a raíz del documental biográfico «Mónica del Raval», del director Francesc Betriu.
Mónica del Raval ejemplifica los contrastes y los cambios del céntrico barrio de Barcelona: su lugar de trabajo durante más de 15 años fueron las columnas de la fachada del Liceu, en la Rambla. Cuando la ópera (y lugar de reunión de las élites) cerraba, las prostitutas esperaban a los clientes frente a él. Hace unos años, el Liceu decidió instalar unas verjas para disuadir a prostitutas y personas sin hogar de hacer noche allí.
A Mónica le gustaba mucho la música, también la clásica, y había acudido al Liceu como espectadora, según explicó ella misma en una de sus últimas apariciones públicas. Fue en Catalunya Ràdio en el año 2017. Un año después empezó a sufrir problemas de salud.
En la radio pública, Mónica habló de la evolución de La Rambla con otro mítico icono del paseo barcelonés, el propietario del bar El Pinotxo, Joan Bayén, fallecido el año pasado. Lejos de la crítica de Bayén a los turistas, tan compartida por miles de barceloneses, Mónica contó su propia experiencia: “Yo qué quieres que te diga, a mí los turistas no me molestan. Cuando trabajaba en la prostitución, pagaban de lo mejor y con modales mejor que nadie”.
Ocho años antes, Mónica del Raval, que ya era conocida por su maquillaje por cualquiera que se paseara por el barrio, había ascendido a mito popular gracias al documental homónimo dirigido por Francesc Betriu. La obra, disponible en Filmin, es un retrato en el que Mónica tiene absoluto protagonismo y en el que defiende que ejerció la prostitución de forma libre y responsable. También participó en otras producciones como ‘Puta y amada’ y ‘Nos parecía importante’, de Marc Ferrer.
En 2018 tuvo problemas de salud que siguió arrastrando durante años. A partir de aquel momento dejó de aparecer públicamente.
Mónica: La reina del Raval
Francesc Betriu bautizó a Coronado como Mónica del Raval a partir del rodaje de una película sobre su historia. Betriu escribió el guion basándose en meses de entrevistas diarias con su protagonista, según explicó en una entrevista en el diario El País. Estrenado el 2009, el film retrata a Mónica empoderando la figura de una mujer que dejó su pueblo natal de joven para dedicarse a la prostitución y que aconteció un símbolo de la ciudad que la acogió desde la Rambla hasta las calles del Raval.
Este artículo ha sido redactado y/o validado por el equipo de redacción de Revista Rambla.