El músico, compositor y, ahora, escritor Pep Lladó presenta su libro Componer canciones para dialogar con el mundo (Amat Editorial) el próximo miércoles, 18 de septiembre, en la Sala Manuel de la Fundación SGAE (Calle Fernando IV, 4, Madrid). Al día siguiente, el jueves, impartirá el Taller de composición de canciones en El Espacio Coral (Calle Arganda, 29).
Pep Lladó, amigo y colaborador del excelentísimo Gato Pérez, fue -tras la muerte del maestro- uno de los fundadores en 1992 del mítico grupo de rumba catalana Ai, Ai, Ai. Lladó, oriundo de Argentona (Maresme, Barcelona), también ha trabajado en solitario. Su último trabajo ha sido Paisatges retrobats (Sota la palmera, 2018) donde vuelve a ponerse a los teclados, siendo también el intérprete de una decena de temas compuestos en su mayoría por él.
En esta entrevista, Pep Lladó nos desvela algunos de los secretos que le han convertido en uno de los autores mejor considerados de la rumba catalana.
¿Qué se necesita para componer canciones?
Tener algo que expresar y la valentía suficiente para lanzarse. Con estas dos premisas claras, no habrá dificultad técnica que pueda detenernos. Seguro que cada uno puede encontrar su propia manera, así lo viene haciendo la humanidad desde que el mundo es mundo.
¿Qué hay de las propias composiciones?
Componer canciones nos puede ayudar a afrontar situaciones difíciles y a vivir con más alegría las placenteras. A nivel personal, apoyarme en la composición de canciones en los momentos más dolorosos de mi vida, ha sido de gran ayuda.
¿Vivir rodeados de música cómo nos puede ayudar?
Es mejor vivir llenos de música que rodeados de música. En la actualidad escuchamos mucha música de forma involuntaria y esto nos priva del silencio. El silencio es el espacio donde recordamos e imaginamos música. Si les damos la oportunidad del silencio, las canciones se expanden más y más en nuestro interior llenando todos los espacios, ahí es donde las canciones se convierten en una herramienta maravillosa de diálogo con nosotros mismos.
¿Todos podemos componer?
Todos tenemos el derecho a hacerlo sin la necesidad de que alguien nos avale y nos diga si estamos capacitados para ello. Sin embargo, si nos lanzamos a componer, pueden atacarnos distintos pensamientos negativos. Esto nos sucede a todos, tanto a los principiantes cómo a los compositores profesionales y, por lo tanto, no debe ser motivo para que abandonemos nuestra empresa.
¿Qué supone para uno mismo encontrar las palabras para expresar su mundo interior?
La búsqueda de la palabra exacta, del acorde apropiado, del giro melódico que exprese exactamente lo que estás sintiendo, te lleva a elaborar el propio sentimiento, es decir, a contártelo mejor. A veces te pasas días, semanas o años intentando cuajar una idea hasta que de pronto aparece ante ti la solución. Cuando se da este pequeño milagro, te das cuenta que, con el hallazgo, se te ha revelado alguna cosa nueva e importante para ti. Es como haber recibido un mensaje del cielo.
¿Cuál es su propósito con este libro?
Este libro es la consecuencia de un taller de composición de canciones que hace tiempo que voy impartiendo. Tanto taller como libro, pretenden incitar a la composición de canciones y mostrar los efectos beneficiosos que esta actividad puede tener en el enriquecimiento de nuestro diálogo interno.
