Un año más llega el 14 de Abril, Fiesta de la República. Una República democrática de trabajadores de toda clase, organizada en régimen de Libertad y Justicia, tal como proclamaba la Constitución de 1931. Desde ADAR queremos reivindicar esta efeméride y todo lo que significa. Lo queremos hacer por la memoria de nuestros padres, tíos y abuelos, por la memoria de los aviadores de la República que durante la Guerra Civil y los años posteriores, sacrificaron su juventud para la defensa de unos ideales de libertad y democracia.
La II República española es, posiblemente, el régimen más democrático que ha tenido nunca España puesto que en aquel momento, el objetivo no era con solo que hubiera democracia, sino que esta sirviera para algo: hacer salir de la miseria a miles de españoles, acabar con los privilegios de clase, eclesiásticos y aristocráticos y dotar a todo el mundo de los derechos y libertades fundamentales. Estos objetivos se materializaron durante aquellos años en una serie de reformas y legislaciones como el derecho al voto de las mujeres, separación Iglesia-estado, la reforma agraria, la potenciación de la escuela pública y laica, la autonomía catalana, la supresión de los privilegios de la Iglesia, el adelanto en la legislación laboral y un largo etcétera de reformas que pretendían hacer salir a España del caduco y retrógrado sistema caciquil de la Restauración.
Desgraciadamente, la España reaccionaria no lo permitió. En julio de 1936, la República fue traicionada por unas élites económicas y por una parte de quienes, supuestamente, la tenían que defender, los militares. La consecuencia, guerra, muerte, sufrimiento, odio y destrucción.
Desde el 1936 al 1939, fueron muchos los jóvenes que se sintieron llamados a la lucha contra el fascismo y en defensa de la democracia y se unieron a las filas de «la Gloriosa», la aviación Republicana. Algunos de ellos eran adolescentes de menos de veinte años de edad, que recibieron rápidos cursos de pocos meses de duración para enfrentarse a pilotos profesionales de la Luftvaffe y la la Aviación legionaria italiana. Cumplieron su deber y lo pagaron con la vida, la prisión o el exilio. A todos ellos, gracias.
La República se vio, en aquel momento, abandonada por sus supuestos y teóricos aliados. Las democracias occidentales dieron la espalda a la democracia, bajo el amparo de una criminal e hipócrita no-intervención que solo sirvió para que el fascismo ganáse terreno. Llegó ayuda de la URSS y gracias a ésta, la República aguantó el asedio del fascismo durante casi tres años, pero fue insuficiente y el desenlace es más que conocido: la imposición de un régimen totalitario durante más de cuarenta años, las consecuencias del que seguimos viendo cada día.
Aprovechando el 14 de Abril, desde ADAR queremos exigir lo siguiente: democracia, justicia y reparación. Desde el 1975 el país ha avanzado mucho, pero no suficientemente. Desde ADAR trabajamos por la dignificación de la memoria de quienes lucharon por la democracia, trabajamos por la localización e identificación de desaparecidos, para darles una sepultura digna. Lo hacemos con ganas y voluntad, pero también somos conscientes y decimos muy claro que es a las instituciones a quienes corresponde esta tarea y más cuando quienes gobiernan dicen ser defensores de los valores republicanos. Algunos dicen que tenemos que dejar de mirar atrás, pero un país no puede dejar de mirar atrás cuando sigue teniendo crímenes impunes y miles de fosas comunes con personas sin identificar.
La actual situación de crisis del Covid-19 nos angustia y nos preocupa. Somos conscientes que ahora hay que centrar todos los esfuerzos vencer el virus e impedir que la crisis económica que vendrá no la paguen los más desfavorecidos. Aún así, cuando salgamos de esta, seguiremos exigiendo, que las instituciones se tomen las políticas de memoria de una manera seria, puesto que es esta la única manera de superar el trauma que significó la Guerra Civil.
*ADAR es la Asociación de Aviadores de la República.
