Procés Constituent está decidido a apostar por la confluencia con Guanyem Barcelona. El movimiento aprobó este pasado domingo un documento que considera que Guanyem «puede ser el espacio de referencia mediante el que se articule la confluencia» entre las diversas fuerzas políticas y organizaciones sociales y ciudadanas que apuestan por una alternativa al actual modelo de poder municipal.
Procés Constituent está decidido a apostar por la confluencia con Guanyem Barcelona. El movimiento aprobó este pasado domingo un documento que considera que Guanyem «puede ser el espacio de referencia mediante el que se articule la confluencia» entre las diversas fuerzas políticas y organizaciones sociales y ciudadanas que apuestan por una alternativa al actual modelo de poder municipal.
El movimiento político impulsado por la monja benedictina Teresa Forcades y el economista y activista social Arcadi Oliveres defiende “la necesidad de transformar las políticas municipales y, por lo tanto, ser presentes en el Ayuntamiento a través de una candidatura unitaria y rupturista” por lo que, en el primero de los cuatro acuerdos consensuados en la segunda asamblea de Procés Constituent de Barcelona, señala que «las personas activas en Procés Constituent son soberanas para trabajar en espacios de confluencia siempre con el objetivo de una candidatura unitaria y rupturista para conseguir la soberanía de las personas». Un claro respaldo a la participación en diferentes espacios para «reunir el mayor número de sensibilidades coincidentes«, según los acuerdos adoptados por Procés Constituent.
El apoyo explícito de Procés Constituent a la iniciativa Guanyem Barcelona sigue al desmarque anunciado por la CUP que anunció este pasado fin de semana una candidatura rupturista propia en Barcelona. La CUP se aparta de esta manera del proyecto lanzado en junio, con Ada Colau o Jaume Asens como caras más visibles, en el que han venido participando otras fuerzas de izquierda como ICV-EUiA, Podem Barcelona o el Partido X. La decisión de la organización de la izquierda independentista llega tras la celebración de sus terceros encuentros municipales -Trobades Populars Municipalistes– y se hará visible en las próximas semanas con una candidatura propia para las municipales y un nuevo encuentro que servirá para debatir y aprobar el nombre de la lista, el programa electoral y la elección de sus integrantes.
La principal diferencia para la confluencia, que Procés Constituent no ha querido valorar, son las diferencias respecto al Código Ético elaborado durante las jornada “Guanyar obeïnt”, impulsadas por Guanyem y en la cual participaron todas las fuerzas de izquierda interesadas en una candidatura alternativa y de confluencia. Las principales diferencias sobre los documentos generados en las jornadas y que han llevado a la CUP a desmarcarse del proceso de confluencia han sido la duración de los mandatos -no ven defendible una prórroga al máximo de dos mandatos– y los sueldos de los cargos políticos -1.800 euros de límite frente a los más de 2.000 defendidos por el resto-. Unas correcciones al Código Ético que se suman a un programa político de ruptura y que sirva para una «radicalización democrática» que descentralice la participación política y las competencias desde el Ayuntamiento hacia los distritos, la remunicipalización de servicios públicos -con el agua como objetivo principal- o la creación de empresas municipales en sectores económicos muy castigados por la crisis como la construcción. A esto, las CUP quieren sumar la aplicación de una política municipal de vivienda que impida desahucios y pisos vacíos mientras haya personas sin hogar en Barcelona.
La inclusión de Iniciativa per Catalunya ha sido el principal escollo para la entrada de las CUP en una candidatura de confluencia en torno a Guanyem Barcelona. La participación de ICV en los últimos gobiernos de la Generalitat y municipales lastraban, a juicio de la formación independentista, el posible desarrollo de una candidatura común, más aún si los ecosocialistas no reconocían en ningún momento sus responsabilidades políticas en el actual escenario autonómico y municipal, lo que ha ocasionado diversos roces y ha acabado por apartar a las CUP de Guanyem Barcelona.
