Los grandes complejos industriales son fuente de riqueza y empleo en la zona que se ubican. Estas grandes compañías traen de la mano una revolución en la zona que se implantan, generando mucha actividad de forma indirecta que pone más en relevancia la valía de esta industria.
Dentro de estas grandes compañías productivas, las instalaciones eléctricas industriales están presente en su mayoría. De esta ingeniería eléctrica depende la buena archa diaria de la empresa, ya que, si existe un fallo a este nivel, la cadena de producción de determinados bienes se detendría con las consecuencias nefastas a nivel económico que traería de la mano.
El gran público quizá desconoce esta maquinaria de gran consumo, pero es conveniente tener nociones de lo fundamental que es tener una correcta electricidad a gran escala. Todas ellas funcionan con corriente trifásica. Normalmente, las Instalaciones Eléctricas Industriales, trabajan con una energía entre 10 kV y 20 kV, que se considera como Media Tensión, o bien superior a 30 kV y que obtienen la calificación de Alta Tensión.
Las Instalaciones Eléctricas Industriales conllevan una responsabilidad añadida, por la peligrosidad de su manipulación. Lo cual implica, que solo empresas como Cimelsa puedan afrontar su instalación, diseño, reparación y mantenimiento de instalaciones eléctricas, por su conocimiento, preparación y experiencia superior a 30 años.
Con toda esta información, se puede responder de manera más convincente a la cuestión qué son las Instalaciones Eléctricas Industriales. Un complejo de esta escala y naturaleza requiere que profesionales con años de experiencia y de plenas garantías, para conseguir que la electricidad no sea un problema en empresas de estas dimensiones.
La fiabilidad es fundamental para que las cadenas de montaje o los equipos informáticos no sufran alteraciones. Con ello, todo el capital humano puede estar seguro de que su día a día no tendrá disfunciones que comprometan cumplir con los objetivos de producción fijados por la compañía en cuestión.
En muchos casos nadie se cuestiona la necesidad de que la electricidad y la luz llegue correctamente a empresas y hogares. Muy pocas personas se cuestionan como se genera la electricidad, y los procesos que se necesitan para que cuando pulsemos un enchufe o demos un interruptor se haga la corriente deseada. Esto es lo que sucede a una mayor escala industrialmente, por lo que empresas de gran valor añadido en el campo eléctrico son una necesidad a contratar cuando se quiera montar una instalación de gran calado, o se lleve a cabo un mantenimiento que elimine posibles sustos diarios. En este último punto, la seguridad es algo primordial como se ha demostrado en determinados sucesos puntuales producidos en los que no se ha llevado este campo a la máxima expresión.
Otro punto a tener en cuenta es la eficiencia energética. Más si cabe en estos últimos tiempos en los que los costes eléctricos se han disparado. La instalación de materiales eficientes que traigan consigo un bajo consumo y por ende una ahorro para las diferentes empresas que implanten estos sistemas.
