Todos los partidos de la oposición y numerosos movimientos sociales reclaman el fin de la impunidad en torno a los sucesivos abusos de los Mossos d’Esquadra que se viven en Barcelona.
De los miles de turistas que cada día pasean por Las Ramblas de Barcelona, muchos van con miedo. Temen que los carteristas aprovechen un despiste para hacerse con su cámara de fotos, temen que al entrar en el famoso Mercado de la Boquería alguien les quite el bolso. ¿Pero qué es lo que verdaderamente convierte a una de las mayores capitales turísticas de Europa en terreno inseguro? ¿Los ladrones o la policía?
Abusos de los Mossos d’Esquadra: casos Benítez – Quintana
Ocho agentes de los Mossos d’Esquadra imputados por la muerte del empresario Juan Andrés Benítez tras su detención el pasado 5 de octubre en el barrio del Raval, cinco agentes de la misma comisaría también imputados por abuso policial hacia el periodista Bertran Cazorla y por agresión a un motorista. Sin olvidar el caso de Esther Quintana, que hace un año perdió un ojo durante una manifestación, presuntamente, a causa de una bala de goma lanzada por los Mossos.
La brutal paliza que se ha podido ver en los vídeos presentados como pruebas ante la justicia —y difundidos luego por la prensa— han vuelto a poner sobre la mesa la desprotección que sienten muchos ciudadanos de Barcelona ante aquellos que, en teoría, están ahí para protegerlos. «En el Raval la policía debe respetar los derechos de sus conciudadanos como en el resto de barrios» reclamó Iñaki García, portavoz de la Asamblea de vecinos del Raval, durante la rueda de prensa brindada junto a otras asociaciones y movimientos sociales tras la imputación de los ocho policías por la muerte del empresario del Gaixample. García criticó además la actitud «arrogante y prepotente» que tienen los agentes que trabajan en el Raval, “generando miedo desde que salen del coche patrulla”.
La Federación de Asociaciones de Vecinos de Barcelona (FAVB), la Asamblea de vecinos del Raval, el Front d’Alliberament Gai, Reraguarda en Moviment y Ester Quintana (Ojo con tu ojo) han pedido este martes el cese»fulminante» del director de los Mossos d’Esquadra, Manel Prat, y han exigido también que se «depure» la comisaría de Ciutat Vella por el caso de Benítez y otras actuaciones como la redada en el local de ambiente ‘La Bata de Boatiné’ en el Día del Orgullo Gay, la detención del periodista Bertran Cazorla y la presión que, aseguran, sufren las prostitutas.
Sin embargo, nada más lejos de la intención manifestada por los responsables de las fuerzas de seguridad durante los últimos días. El Director General de los Mossos d’Esquadra, Manel Prat, ha insistido en diversas entrevistas que no se le ha pasado por la cabeza presentar su dimisión porque «está por valorar si la actuación fue incorrecta». De hecho, ha recordado que «alguna vez» ha presentado la renuncia (en el caso de Esther Quintana) y «no ha sido aceptada».
El director de los Mossos ha querido dejar claro que, en las imágenes filmadas por los testigos, el detenido todavía no está completamente reducido cuando recibe los golpes de los agentes y que, en todo caso, estos no se propinan en la cabeza, tal y como señala el informe de la Policía Nacional. Además, en una entrevista para Catalunya Ràdio, Prat ha justificado la violencia por parte de los agentes porque «hay momentos en que la policía tiene que hacer uso de la fuerza, no para hacer daño, sino para ablandar a la persona y ponerla boca abajo, con los brazos atrás, para poderlo esposar».
En su intento de exculpación, el máximo responsable de la policía autonómica no está solo. A su lado se encuentra el Conseller de Interior, Ramon Espadaler, quien continúa defendiéndolo contra viento y marea a pesar de las presiones de la mayoría de los partidos para que sea destituido por su gestión del caso Benítez. “En un momento difícil, Prat cuenta con todo mi apoyo y todo el del Govern” ha afirmado Espadaler este miércoles en la sesión de control parlamentaria. “La nuestra es una policía democrática, no nos podemos permitir que el cuerpo de los Mossos se convierta en un objeto arrojadizo entre partidos políticos” concluyó su intervención insinuando que no hay abusos de los Mossos d’Esquadra.
Pero más allá de las férreas convicciones del Conseller, la comisión de Interior ha acordado este jueves por unanimidad su comparecencia urgente para dar explicaciones en el Parlament sobre la muerte del empresario en el Raval y sobre la situación de la policía catalana. Todos los grupos han apoyado las peticiones de Iniciativa per Catalunya (ICV), Ciutadans, PSC y PP para que Espadaler comparezca ante la cámara catalana y se posicione, no solo acerca del caso de Juan Andrés Benítez sino también sobre la política de seguridad de su departamento y las últimas actuaciones policiales, por las que se acumulan ya 13 imputaciones a agentes de la comisaría de Ciutat Vella.
“Si en la comparecencia no se anuncia la destitución del director de los Mossos d’Esquadra, Manel Prat, promoveremos la reprobación del Conseller en el Parlament” ha adelantado ICV. Y no son los únicos. Ester Quintana, la mujer que ha perdido un ojo a causa de una bala de goma disparada por los Mossos durante la última Huelga general en Barcelona, se personará también para comparecer en solidaridad con Benítez. La fecha estimada para la declaración de Espadaler —que también había pedido acudir a la cámara catalana para dar su versión del caso del Raval— es la del próximo jueves 14 de noviembre, cuando hay convocada una nueva reunión de la comisión de Interior. Para ese día, Ester Quintana ha anunciado una manifestación que saldrá, a las 19.30 horas, desde la calle Aurora, donde tuvo lugar la violenta reducción del empresario, hasta plaza Sant Jaume, sede de la Generalitat, para «unirse y hacer fuerza». Porque si hay algo que en Barcelona da cada día más miedo, es la impunidad.
Este artículo ha sido redactado y/o validado por el equipo de redacción de Revista Rambla.